Imagínate que vives en las montañas de Chiapas, Oaxaca, Guerrero o Puebla y que eres productor, digamos, de café. Sabes que México es uno de los 10 países cafetaleros más importantes del mundo y que ocupa el primer lugar en producción orgánica del grano. También sabes que el tamaño del mercado internacional es de miles de millones de dólares: anualmente el planeta produce y consume 150 millones de costales.
Sin embargo, a pesar de que sabes todo eso, tu comunidad es una de las más empobrecidas del país. Este año sólo recibiste 30 pesos por kilo de café cosechado. Lo más extraño de todo es que cada año ese precio cambia, pero nunca es suficiente para satisfacer tus necesidades y las de tu familia. Obviamente, tampoco tienes acceso a créditos productivos para mejorar tu trabajo. Ahora imagínate que además de eso, no eres productor, sino productora, y tu situación es todavía más precaria porque no sólo tienes que trabajar el campo, sino cuidar a tus hijas e hijos y atender las actividades del hogar, por las que no recibes retribución alguna. Lo que no sabes con certeza es por qué las cosas son así.
Digamos que te pones a investigar y encuentras que entre la producción del cafetal y la gente que consume en las cafeterías hay hasta 12 personas intermediarias, que cada una saca su parte. Que el precio de tu cosecha se decide, quién sabe cómo, a miles de kilómetros de tu casa en la bolsa de valores de Nueva York. Que aunque en el país hay cientos de miles de productoras y productores que cosechan el grano, solamente cuatro empresas controlan la exportación. Te das cuenta también, de que el precio de una taza de café no cambia cada año… bueno… tal vez sí sube, pero a ti te siguen tocando solamente 40 centavos por taza.
Investigas un poquito más y encuentras que hace un par de años las utilidades de una de las empresas más grandes en el mundo del café fueron de varios millones de dólares…quizá hasta te cuesta imaginar cuánto es eso. Piensa en lo que podrías hacer con ese dinero para mejorar tus condiciones de vida, las de tu familia y las de tu comunidad…en una de esas, hasta las de tu país. Te surge también la duda de si alguien realmente necesita todo ese dinero para vivir y ser feliz.
Imagínate que en ese punto empiezas a preguntarte si todo esto podría ser diferente: ¿y si tú también participaras de la transformación y la venta de tu café?, ¿y si con el resto de las productoras y productores de tu comunidad definieran el costo por kilo de café?, ¿y si en lugar de que sólo cuatro empresas se quedaran con todas las utilidades, ese dinero se repartiera de manera justa?, ¿y si parte del dinero se utilizara para crear fondos de ahorro o préstamos para mejorar la producción y atender otras necesidades de la comunidad?, ¿y si quienes consumen el café se preocuparan por todo esto?, ¿y si las personas fueran el centro de esta otra forma de hacer economía y no el dinero?, ¿y si las relaciones se plantearan desde la colaboración y no desde la competencia?, ¿y si hiciéramos esto también con el maíz, el amaranto, los plátanos, la carne, el mezcal, las artesanías o cualquier otro producto?
Muchas personas nos preguntamos esto todos los días y sabemos que hay miles que ya están organizadas trabajando para construir una economía más humana. Que se han organizado en cooperativas, colectivos, empresas de economía solidaria; que han creado monedas alternativas y sistemas de trueque, que construyen circuitos económicos solidarios, que generan acceso a servicios financieros a través de microfinanzas y finanzas solidarias, que abren canales de comercio justo y comercio directo.
Personas que demuestran con sus iniciativas que los beneficios pueden y deben ser para todas y todos. Por eso, en Oxfam México estamos lanzando la convocatoria para nuestro programa Economías Inclusivas, para conocer, trabajar y aprender junto a las personas y colectivos que le están dando un rostro humano a la economía ¿te imaginas siendo parte?
Si estás trabajando en una iniciativa cuyo objetivo principal sea mejorar la vida de las personas y las comunidades en Oaxaca, antes que generar ganancias, te estamos buscando. Échale un ojo a nuestra convocatoria, esto podría interesarte.
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